13/5/09

Cambiando de óptica

A falta de tiaras y juego de princesas en la infancia (entre otros), de grande cada vez que me dijeron que les gustaba o que me querían resulté preguntado ¿por qué?
Es así, la mayoría del tiempo tengo más fé en los demás que en mi misma.
Habiendo identificado el problema como una cosa grave, decidí tomar cartas en el asunto, y con un poquito de determinación un día me metí en un vestidito y zapatos de tacón, me maquillé más de lo normal, y cuando se me acercaron no me pregunté por qué, sino por qué no?.
Cuando por una vez estás firme en tus zapatos (aunque admito haber perdido práctica en los tacones, mis rodillas dan cuenta) dejas de mirarte el ombligo preguntando qué anda mal contigo y empiezas realmente a ver a los otros.
Digamos que me pasé de rosca, como en la prueba del oftalmólogo, me calcé un aumento mayor del necesario, pero esa nitidez que a uno le es ajena en la vida diaria, es una ilusión que vale la pena probar.

Resultado de la operación: empecé a ver las grietas en los otros y pasaron tres cosas:
1. Me di cuenta cómo me veía yo antes y entendí por qué nada funcionaba. (al menos uno de los aspectos)
2. Humanicé un poco a esos semidioses creados por mi cabeza insegura. Vi cómo se caían a pedazos los egos y la confianza de los más cancheros, de los más seguros, sólo con mirarlos un poquito más.
3. Me di cuenta que tenía que moderar, volver a un aumento inferior. Ya lo decía una amiga, todo es cuestión de balance.
Ni mucho que queme al santo, ni tan poco que no lo alumbre. Me bajé de los tacones y estoy probando con los planos, a ver si me cambia la perspectiva.

3 comentarios:

oveja y negra dijo...

Muy buenas conjeturas.Me encantó este dicho:"Ni mucho que queme al santo, ni tan poco que no lo alumbre" Jamás lo había escuchado.Besos.

Lucas.- dijo...

jaja.. genial... me costó seguirte un toque.. por un momento pensé que te habías hecho las tetas.. (posta)..

te mando un mail.. beso!

Unknown dijo...

Jaja, hacerme las tetas? mis cambios son más sutiles, además, modestia aparte, no las necesito, tengo suficientes.